«Pon fin a la pérdida y el desperdicio de alimentos. Por las personas»

Este fue el lema propuesto por la FAO para celebrar El Día Internacional de la Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos el 29 de septiembre. Sin duda, una clara llamada a la acción para avanzar hacia la construcción de sistemas alimentarios resilientes.

A nivel global, cerca del 14 % de los alimentos producidos se pierden entre la cosecha y la venta minorista. A ello se suma el hecho de que aproximadamente el 17 % de la producción total de alimentos se desperdicia. Y eso no es lo peor, desde 2014 el número de personas afectadas por el hambre no ha dejado de aumentar.

Hay que tener en cuenta que cuando se desperdician o se desechan alimentos, estas se estiman que generan entre el 8 y el 10 % del total de los gases de efecto invernadero (GEI) mundiales. La pérdida y el desperdicio de alimentos también pueden tener repercusiones negativas en la seguridad alimentaria y la disponibilidad de alimentos, y contribuir a aumentar el costo de la alimentación.

Con tan solo un 1/4 de la comida que se tira a la basura podría acabarse con el hambre en el mundo.

Conscientes del grave problema alimentario que atravesamos, desde la Escuela de Hostelería de Galicia Harina Blanca nos unimos a la causa pidiéndoos poner fin a la pérdida y el desperdicio de alimentos que consumimos. Estaremos haciendo un bien necesario para lograr un mundo más sostenible y más consecuente con sus actos.